
Hay noticias que no quieres dar nunca. Hay noticias que no son noticias. Hay noticias dolorosas. Y la que nos has hecho dar es desgarradora. Ayer moriste en Málaga. Ayer, mister, moriste y contigo murió nuestro amigo, nuestro sustento, nuestra familia y nuestro guía.
23 años a nuestro lado.
Miles de alegría, algún que otro disgusto. Horas y horas de entrenamiento, pretemporadas, interminables viajes en autobús y millones de confidencias. Horas y horas de vida. Hasta ayer.
Diego Carrasco, moriste. Y contigo morimos todas mucho. Corazón grande el tuyo que decidió dejar de seguir latiendo. Y con él dejó de latir el nuestro.
Corazón de pantera, siempre latirá bajo el color del Costa, bajo esta camiseta y bajo las camisetas de todas estas jugadoras que nos hemos cruzado en tu camino.
23 años de historia.
23 años a nuestro lado. 23 años que son todo. La historia de este club, la historia del balonmano malagueño, andaluz y español. Algunas hemos compartido más de 15 años jugando a tu lado. A tu lado. Porque eras Diego Carrasco Becerra. Porque eras nuestro Diego. Por tí. A tu lado.
Diego Carrasco Becerra. ¿Sabes que echaremos de menos de tí? Tus palabras de ánimo, tus correcciones, tus tacos en la banda y lo bien que te manejabas con los árbitros. Lo listo que eras y lo que eras capaz de sacarnos. Echaremos de menos tus motivaciones antes de los partidos, tus charlas tras los encuentros y nuestras conversaciones, en cualquier esquina, sobre cualquier cosa. Tus orejas de soplillo. Tu risa y tu sonrisa. Tu generosidad. Tu infinita generosidad. Tu saber estar. Y hasta tu barriga, mister. Tu inteligencia y tu carácter. Nuestras conversaciones juntos. Maldito Diego, te echaremos tanto de menos…
Las que compartimos vestuario, autobús, grada (o una cerveza) contigo no siempre estuvimos de acuerdo, pero nunca vamos a negarte que tu esfuerzo porque esto saliera adelante ha sido el motor de toda nuestra historia.
Tuviste aciertos y errores. Malos modos y abrazos. Te bañaste con nosotras. Lloraste y nos hiciste llorar. Te reíste y nos hiciste reir. Fuiste una de nosotras. Fuiste nuestro lider y te apartaste cuando apareció alguna jugadora señalada por los dioses del balonmano a liderar el equipo.
Diego Carrasco Becerra. Siempre nuestro entrenador. Siempre nuestro amigo. Siempre a nuestro lado. No sabes cuanto te echaremos de menos. Somos equipo. Somos una. Somos todas. Pero faltarás tú siempre a partir de ahora.
No. ¿Sabes qué? Tu nunca te irás porque te llevamos dentro.
Mister: todas te echaremos de menos. Vete tranquilo. Tus panteras luchan por tí. #JugamosPorTí
Siempre tuyas,
Panteras